Gran parte de las personas, y con mucho cuidado pienso en grandes
sociedades, busca un equilibrio. Busca estabilizarse, ya sea económica o
socialmente. Gran parte de esa gente, mas abiertamente podemos hablar de un
todos nosotros, busca mantener constante, o a su vez mejorar gran parte de su
vida. Con cierto miedo digo “todos nosotros”, porque uno intuitivamente busca
ese tipo de equilibrio social, busca ese salario muy poco penoso. Buscamos la
igualdad social (algunos muchos de ese todos nosotros). Pero a su vez, para
contradecir esta ideología momentánea, también podría llamarla ideología parcial,
convivir el dia cotidiano con biólogos, con científicos exactos, que para ellos
el equilibrio es sinónimo de muerte me hace llegar a la conclusión de que con
cierta gratitud no vivimos en un equilibrio, no vivimos en condiciones
constantes.
Es inquietante y muchas veces genera gran incertidumbre encontrarse en
equilibrio, no obstante constantemente generamos planes futuros, ideas a gran
escala, ilusiones mezcladas con fantasías posibles. Y es donde uno se pregunta ¿Por
qué? Por qué viviendo un presente, pensamos en un futuro, por qué estando
cómodo o satisfecho en una situación buscamos mejorarla, no pensando en que quizás
pueda empeorar. Por qué pensamos en todo lo que resta y no en lo cierto, en lo
que pasa ya, en lo que se disfruta y se sufre.
Qué locura me es pensar en proponer vivir el hoy, si mucha gente no
tiene un ayer. Y más curioso se me hace la idea de buscar ese equilibrio, si
siempre le escapamos a la muerte.